Autónomo TRADE guía a fondo: qué es, qué características tiene, contrato TRADE y más
Hoy os queremos hablar de un tipo de trabajador por cuenta ajena que tiene una casuística de lo más particular, tanto es así que dispone de un tipo de contrato de colaboración: se trata del autónomo TRADE, una abreviatura de “trabajador autónomo económicamente dependiente”. Ojo, no confundir con un falso autónomo, porque son casos diferentes y ya os adelantamos que en el caso de los TRADE, se trata de una figura completamente legal.
Se llaman autónomos TRADE porque como recoge el artículo 11 del Estatuto del Trabajo para Autónomos, son aquellos autónomos que llevan a cabo una actividad económica o profesional a título lucrativo y de forma habitual para una persona física o jurídica.
Que un autónomo tenga pocos clientes no significa que pueda considerarse como TRADE. A decir verdad, se define así a quien facture un 75% o más a un único cliente, el resto de sus ingresos provendrán de otros clientes.
Los requisitos tiene que cumplir un autónomo TRADE marcan importantes diferencias respecto a los falsos autónomos. Así, un TRADE:
- No tener trabajadores al cargo ni recurrir a la subcontratación.
- Contar con sus propios recursos para el ejercicio de su actividad profesional.
- Que la organización de tu trabajo sea propia y no ajena.
- Trabajar a tu manera y no según los criterios diseñados para los empleados.
- Cobra en función de resultados, no con salarios fijos.
Una vez está claro que un autónomo TRADE no es un empleado de una empresa encubierto (como lo sería un falso autónomo), toca repasar otro punto: el contrato TRADE.
En este documento, del que deberá quedar constancia en el SEPE, deberá aparecer la identificación de ambas partes, el objeto y causa de este, régimen de vacaciones, descansos y festivos, la relación de colaboración como autónomo, las condiciones económicas. En cuanto a la duración, puede ser concreta o quedar supeditada al fin de obra. Como ves, este contrato TRADE beneficia al autónomo, al proporcionar cierta seguridad laboral frente a una relación profesional estándar entre cliente y trabajador por cuenta propia.
